No siempre uno es fuerte y tiene la sonrisa en la cara, hay días en los que sentimos que le falta color a nuestra vida. Y es que hasta el árbol más fuerte y robusto, a veces se cae y necesita apoyo.
Hay días en los que te sentirás como un grano de arena, indiferente ante el mundo que te rodea. Pero recuerda, que granito tras granito se forma una hermosa montaña.
Porque vales más de lo que crees y aún mucho más de lo que pueda percibir la gente.
Puede haber días malos, dónde te sientas triste y que el mundo pierde sentido. Pero debes subir, retirar las lágrimas de tus ojos y crecer fuerte.
Que nunca se apague la luz de tu mente, no pierdas la sonrisa, ni las ganas de ser feliz.
Aún con plomo en el alma y pesadumbre en tu cabeza, debes intentar ver con claridad.
Ante todo... si algún día te sientes mal e inútil, recuerda que hay gente que te apoya y que te quiere. Que no estas sólo, aunque a veces creas que sí. Eres importante, no lo olvides.
Así que.. sonríe, grita fuerte, date un capricho, sueña, vive, haz el loco y se feliz. Porque serán esos, los buenos momentos que merecen la pena recordar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario